Después de una temporada llena de dudas y problemas parece que Los Ángeles Lakers quieren compensar a Pau Gasol (e indirectamente a Kobe y a toda la Laker Nation) con una serie de movimientos especialmente diseñados para mejorar el “status” y la involucración del jugador de Sant Boi en el equipo.

Cuando se ha visto que el valor de mercado de Pau no compensaba su traspaso, el equipo directivo de la franquicia se ha movido rápido y en la dirección correcta. Lo primero cortar todas las conversaciones de traspaso en las que estuviera involucrado y no hace falta ser un lince para ver como los rumores involucrando a Pau han descendido a cero. Lo siguiente y bastante mas espectacular es el “fichaje” de Steve Nash uno de los mejores pasadores de la historia y jugador que tiende a dominar el balón pero con una mentalidad de “pass first”. Por si fuera poco es, quizás el mejor jugador de “pick & roll” que ha dado este deporte, muy inteligente que además se crece cuando tiene jugadores con alto “Basket IQ” a su alrededor. En otras palabras, el socio perfecto para Pau. Incluso Kobe ha reconocido que este fichaje a quien mas va a beneficiar es al jugador catalán y es que Nash y el se complementan a la perfección no solo en el aspecto deportivo sino en el personal.

No obstante y pese a lo espectacular de la llegada de Nash, el movimiento definitivo para mimar a Gasol, no hace ni una semana que se ha producido y no es otro que la llegada de Eddie Jordan, antiguo entrenador jefe de Kings, Sixers y Wizards, como asistente para llevar el ataque de los Lakers. Ya quedo patente que ni John Kuester ni el propio Brown tenían las mimbres para organizar la ofensiva de una platilla como esta. Y no es que la carrera de Jordan como entrenador haya sido una maravilla (alcanzo su cumbre con los malogrados Wizards de Jamison, Butler y Arenas) pero con el trae la verdadera clave de todo esto: The Princeton Offense.

Ciertamente este tipo de ataque, si bien no tiene el glamour del Triangulo Ofensivo de Tex Winters, si que ha cosechado ciertos triunfos de la mano de su principal desarrollador Pete Carril en la Universidad de Princeton y Rick Adelman (aunque de una manera menos pura) en Kings y Rockets. No ha tenido toda la aceptación que se merece ya que para su optima ejecución necesita de al menos 4 jugadores capaces de driblar, pasar y tirar con efectividad, además de tener todos un alto grado de “Basket IQ”.

En si mismo este estilo de ofensiva se basa en la movimiento rápido del balón por el perímetro hasta encontrar una desventaja individual o a un jugador cerca del aro, a través de múltiples cortes por detrás de la canasta. Y es aquí donde encontramos el verdadero sello de Princeton, el “backdoor pass” a esos jugadores que cortan constantemente, y la pieza critica de este sistema un jugador de poste lo suficientemente bueno como para ser una amenaza en el uno contra uno pero con la capacidad de pase para volver a sacar el balón fuera o pasar al jugador que corta, cuando reciba la ayuda de la defensa en un 2 vs. 1. Si, esta característica del hombre alto pasador recuerda un poco al rol del hombre alto pasador del Triángulo de Winters y casa a la perfección con el estilo de juego de Pau Gasol, que vera la cantidad de balones que llegan a sus manos multiplicada, aun mas con la Steve Nash a los mandos del barco.

Aun así habrá que ver como se adapta el quipo entero a este cambio en el estilo de juego ya que este sistema se basa enteramente en la disciplina y trabajo en equipo, dos atributos que necesitan de confianza entre los componentes para desarrollarse. Y de eso no andan sobrados en el vestuario angelino. Eso si, es necesario que incluso el Pívot sea capaz de tirar (y meter) triples así que suponemos que Andy Bynum debe estar casi tan contento como Pau. Por ahora Kobe ha dado su beneplácito al cambio de estrategia y en principio, con la llegada de Nash, su carga en al ataque (que no anotación, en la que supongo seguirá igual) se reducirá ya que se podrá olvidar completamente de la parte organizadora. En cualquier caso tendrá que hacer algunos ajustes, sobretodo en el aspecto de la cantidad de tiempo con el balón en las manos, para el correcto funcionamiento del sistema.

Pau es uno de los jugadores mas inteligentes que hay en el mundo, parece lógico que su resurgimiento venga de la mano del sistema desarrollado en una de las universidades mas prestigiosas del mundo.

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Claudio Rueda en Twitter: @claunchin