Cuando los aficionados Lakers volvemos la mirada hacia 2004, lo que vemos nos produce un dolor sordo, de lo que pudo ser y no fue, de un ridículo espantoso en las Finales, de la entrada repentina en el modo reconstrucción… desde luego no creíamos que en la misma generación íbamos a tener que pasar por un trago similar. Y sin embargo aquí estamos, después de pasar por un verano tan ilusionante como el de 2003, la realidad nos ha golpeado en la cara y bien fuerte. Por extraño que parezca, los Lakers de Bynum lesionado, Fisher de base titular, Kobe lanzando por debajo del 45% y Mike Brown en los banquillos, mostraban un nivel de juego netamente superior al de estos remozados Lakers.

Lo más sangrante de todo es que los problemas que acucian a estos Lakers son exactamente los mismos que la temporada anterior, falta de esfuerzo en ambos lados de la cancha. Si, la comunicación en defensa es defectuosa, las rotaciones lenta y la mayoría de veces confusas, en ataque dejan mueven la pelota en base a lo que dicta la defensa en vez de romper esa misma defensa con el movimiento de la pelota, se cometen errores de bulto, salvo Kobe el acierto general es más bien pobre….. y aun así el principal problema, como ya he dicho, es la falta de esfuerzo en general, pero no solo esfuerzo físico, de correr un poco más, poner los bloqueos bien, de pasar los bloqueos rápido, de luchar los balones divididos…. sino de esfuerzo mental, de ganas, de actitud… Cierto es que el cambio de entrenador y las lesiones no ayudan, pero en esta plantilla cuenta con calidad de sobra para arrasar a equipos como Orlando o Cleveland.

De hecho estos problemas viene a ser comunes desde hace 2 temporadas y media, coincidiendo con la toma de posesión de Jim Buss (ya sé que llueve sobre mojado, y no es la primera vez que lo crucifico). Lo que por otra parte podría sonar ridículo, ya que incluso con su mala gestión el no es el que juega, el no es el que monta las estrategias (aunque en cierto modo es él, el que elige a los jugadores que vienen al equipo y a los entrenadores que elaboran las estrategias). Lo que es indudable es que el problema esta ahí, es una falta de concentración, de compromiso y de esfuerzo llamativa. Y llegados a este punto es inevitable acordarnos de Phil Jackson, un entrenador que sobre todo destaca por ser capaz de cambiar el espíritu de un equipo. También es momento de acordarse de las declaraciones de Bryant, después del despido de Brown, piropeando al Zen Master, de los cantos del STAPLES “We want Phil!! We want Phil!!”, de cómo Gasol alcanzo su punto álgido como jugador en la NBA bajo sus órdenes…. y por supuesto de los interminables enfrentamientos entre Jim y Phil (y Jeani), la lucha de egos…. Aun así romperé una lanza en favor de Buss Jr. diciendo que nadie se esperaba tal desastre con D´Antoni, que a priori parecía una buena elección para el equipo (también es verdad que llevar un sistema como el de D´Antoni, con el PG reserva del PG reserva, no ayuda mucho…).

La solución, puede ser tan sencilla y complicada al mismo tiempo, como un cambio de mentalidad, lo que ahora mismo no parece probable, ni mas traspasos, ni más cambios de entrenador van a ser necesariamente buenos. En realidad los Lakers están en una situación muy complicada ya que han hecho el límite de cambios que un equipo debe hacer sin comprometer en exceso la estabilidad, y estos cambios lo que han dado es un desastre de equipo…. Entonces ¿ahora qué? Aun queda la esperanza de ver cómo funciona este equipo con todas sus piezas sanas (eso incluye a un Pau Gasol al 100% tanto física como mentalmente) la parte negativa es que estas piezas no van a mejorar ni un ápice el principal problema del equipo: la defensa. Es ya agarrarse a un clavo ardiendo, pensar que unos “Chermistry Makers” como Nash y Gasol son capaces de mejorar la confianza y la comunicación en el equipo, pero pocas esperanzas quedan ya.

Yo me resisto a dar por perdida la temporada por completo a mediados de Diciembre y sigo dándoles hasta el partido de Navidad como límite, si las cosas no mejoran para entonces, si que la daré por muerta y habrá que ir pensando en cómo convencer a Howard para que renueve….

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Claudio Rueda en Twitter: @claunchin