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Las mujeres de Juego de Tronos

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Hace tiempo que, haciendo una lista de mis personajes favoritos en el mundo seriéfilo me percaté que la abrumadora mayoría eran hombres. Descartado un desorden hormonal (nótese que en ella figuran sex-symbol tales como Tony Soprano ó Walter White) invertí cinco segundos en concluir que la culpa no era mía. Así como en la literatura está preñada de personajes femeninos gozosamente interesantes; si traslado la reflexión a la pequeña (o gran) pantalla la cosa se tuerce. Por cada Omar Little, Toby Ziegler, Jimmy McNulty, Fraiser Crane o Jed Bartlet me salen sólo un par de C.J Clegg, Jessica Lange ó Patty Hewes. Si piensan que es mi culpa y servidora es una machista de la peor calaña, este es el punto en el que deberían dejar de leer y pasar directamente a la zona de comentarios para los insultos.

Los supervivientes, pueden respirar tranquilos, porque no vengo hoy con ganas de  convertir esto en un panfleto feminista, que es martes. Pero para llegar al punto al que quiero, era necesario poner sobre la mesa lo que a mí me resulta un hecho evidente (aunque discutible) : cuesta mucho más encontrar personajes femeninos interesantes, que masculinos. Y parece que no soy la única: en la lista de personajes más queridos votada en  Entertainment Weekly también ganan los hombres. Los interesados en el asunto estarán al tanto de la gran cantidad de publicaciones que indagan en los porqués de este fenómeno, atendiendo a diversos criterios. A ellos les remitimos si quieren profundizar.

Ni alegatos feministas, ni sesudos análisis. Entonces, ¿a qué viene todo esto? Pues no es más que una burda excusa para hablarles de una de las mejores cosas que está teniendo la tercera temporada de Juego de Tronos, ahora en emisión: una completa galería de personajes femeninos de lo más interesante. Con matices, bien elaborados, fuertes y lejos de la bidimensionalidad clásica del ángel o el demonio. Guerreras, salvajes, doncellas, maquiavélicas o rematadamente estúpidas. Superado el sempiterno debate sobre el sexposition de Juego de Tronos (porque está superado, ¿verdad?) quizá sea momento de hablar del atractivo de las féminas de la serie, más allá de su curvilínea exposición.

¿Estás atemorizado, niño? No hace falta. Aquí solo somos mujeres”. Esta frase, pronunciada por Olenna Tyrell, viene a resumir el espíritu del universo femenino de la serie. Porque, desenvolviéndose en los cánones de un mundo masculino (es lo que tiene el medievalismo, aunque sea fantástico) las mujeres creadas por George R.R Martin en principio son personajes con  unas cotas de poder mucho más reducidas que las de los hombres. ¿Son solo inofensivas palomitas? Superficialmente pueden parecerlo: de momento solo una mujer parece ambicionar el Trono de Hierro y en el mayor parte de los casos  le deben sumisión a un amo, esposo, Rey o proxeneta. Podemos parar la reflexión ahí, y enredarnos en discusiones sobre el machismo reinante en Poniente y la supeditación de la mujer al varón. Yo, me quedo con lo expuesto por Emily Nussbaum en el New Yorker: lo que define la serie no es solo la lucha por el poder, sino lo que significa ser excluido del poder; por ser mujer, bastardo o “medio hombre”.

Porque muchas de las mujeres en Juego de Tronos son poderosas, aunque no lideren Ejércitos (a excepción de Daenerys Targaryen) dirijan reinos o se manchen las manos de sangre en el fragor de la batalla. Las decisiones que toman (o que provocan que otros tomen bajo su influjo) son trascendentales para el desarrollo de los acontecimientos, y determinan el futuro de todo lo que vendrá después. Su influencia no es accesoria. Más que probablemente no sean ellas quiénes se sienten en el Trono de Hierro, pero no cabe duda de que quien llegue a él, no podrá hacerlo sin su ayuda, consejo o intermediación. Como decía, su debilidad es solo aparente, y les provee del mejor de los escudos: que todos piensen que son solo mujeres, inofensivos jugadores en la batalla. Pero no. Las palabras de Olenna en realidad, son una advertencia.

Según cuenta él mismo, a George R.R Martin alguien le dijo un día que no podía ser feminista por la simple razón de que era un hombre. Afortunadamente le dio absolutamente igual, y siguió construyendo personajes femeninos y masculinos en la misma (y acertada) escala de grises. Imperfectos y perfilados, son sobre todo productos de su tiempo (por muy fantástico y ficticio que este sea). Nada mejor puede decirse de esta galería de damas, que resaltar el hecho de que consiguen despertar odios y amores por su excelente construcción e interpretación. Posiblemente no pasarían la prueba feminista por antonomasia (el test de Becdhel), pero ¿de verdad importa?

Danaerys Targayrean: la favorita oxigenada

Ella es la joya de la corona y una de las protagonistas con más gancho de la saga. De prepúber tiranizada por su hermano a la madre de los Dragones, es la candidata con más opciones para conseguir el Trono de Hierro, así se le crucen brujos amanerados o desiertos indómitos. Su poder crece al mismo ritmo que gana adeptos entre la audiencia, entre los que siento no incluirme, especialmente en esta tercera temporada. Aunque me enamore ver crecer a esos pequeños seres salidos del averno, el rictus de Danaerys empieza a cansarme. Será tanta pretensión de perfección lo que me estomaga. La joven oxigenada quiere el poder (¡bien!) sabe que para ello tendrá que lanzarse a una guerra sin cuartel (¡qué ganas!) pero además, busca llegar al Trono siendo una líder justa y buena (¿Cómo?). O Conan el Bárbaro o Teresa de Calcuta, Kaleshee. Pero los dos, no. Que a lo que vamos es a ganar una guerra, y por si no te habías percatado, en los Siete Reinos el espíritu oenegero no se lleva. Esto es la Edad Media, no te despistes. Confío en que un par de traiciones y puñaladas más le extirpen lo que le queda de candidez y se convierta en la líder bárbara de ese batallón de gitanos que la siguen.

Shae: la crisálida prometedora

Muero de ganas de que este personaje termine de despuntar, para sacarla de la categoría de mujeres-que-prometen-pero-aún-ni-fú-ni-fá y erigirla en una de mis favoritas de una vez por todas. Pero de momento, no es más que una crisálida: lo mejor de ella es lo que aún no sabemos. Mientras siga escondiendo su inquietante pasado, nos entretenemos con su reducido papel como doncella de Sansa y amante de Tyron, pero queremos más. Como mujer inteligente, permanece agazapada esperando el momento idóneo para emerger, aunque nos mate con la intriga.

Catelyn Stark: un poco de prozac para mamá

La sufrida viuda Stark no puede aburrirme más. Aunque su papel era ligeramente esperanzador en la primera temporada, lo cierto es que comienzo a estar muy un poco cansada de su amargamiento perpetuo, por mucho dramón que lleve a las espaldas. Se nos presentó como la mujer de apariencia débil pero de enorme fortaleza y valentía interior, aunque a mí no me la cuela. La madre coraje podrá hacer grandes sacrificios para cuidar de sus hijos, pero me agota su ansia de mortificarse por todos las desgracias del mundo en esa depresión continua que arrastra por los Siete Reinos. ¡Y encima no da ni una!

 Cersei: la gélida y bella malvada

Me pirran las malvadas del cuento, y esta aún más. Aunque es mucho menos inteligente de lo que se cree, a Cersei le va como un guante el papel de mujer intrigadora y calculadora que le ha tocado. Pero donde más me hace disfrutar de su perfidia no es en los tejemanejes que hace y deshace a su antojo, con esa frialdad tan bien estudiada. El sitio de mi recreo son los continuos tropezones y contradicciones de una mujer que no incluye la palabra fracaso en su diccionario. Verla borracha y rendida, sentada en el Trono de Hierro, esperando la muerte fue simplemente memorable. Y estoy segura de que me hará disfrutar mucho más en el futuro: se aproxima el ocaso no sólo de su juventud, sino también del dominio que ejerce sobre el pequeño demonio que ha creado. Poderosa es volcánica, pero herida puede serlo aún más.

Margaery Tyrell: la protobruja viste de seda

Aquí llega otra de mis favoritas, de reciente adquisición. Con una inteligencia retorcida y exquisita, la única hija de Lord Mace Tyrell gana enteros conforme avanza su madurez, y no da paso en falso. Ambiciosa pero cauta, me encanta que explote todo su potencial como mujer para conseguir lo que quiere y de una manera tan reptiliana y elegante. Maestra de la manipulación -y no sólo de los hombres- la bellísima Margaery podrá hacer mucho más que mover los hilos. Si así sigue, acabará quedándoselos. Este híbrido que combina la belleza de la jefa de animadoras con la más lista de la clase es un cóctel explosivo que nos depara impagables momentos.

Arya Stark: la niña es guerrera

La pequeña de los Stark es otro de los papeles preferidos de la audiencia, que no puede evitar ver en ella a esas niñas que preferían los partidos de fútbol que las muñecas. Para la que suscribe -a quien le repelen los personajes de niños en la mayoría de las series- haber despertado el interés por las andanzas de la joven ya es todo un logro. Comparto la admiración por su valentía y su arrojo, pero tampoco conviene precipitarse: lo mejor de Arya está por llegar.

Sansa: la hermana siempre aterrada

Si existe alguien que no considere insoportable a la otra fémina de los Stark, pido por favor que se manifieste. Débil, pusilánime y desorientada, es digna hija de su madre, que consigue aburrir y desesperar con cada nuevo pucherito. Al margen de su relación con Perro, no hay nada que consiga despertar interés en esta versión martiniana de la princesita malcriada que pasa los días esperando a que la rescaten. Seguro que hay algún torreón en donde encerrarla para que espere la llegada de su Príncipe encantado, que ojalá llegue con un poco de carisma bajo el brazo.

 Brienne: la bestia leal

Fabuloso personaje y fabulosa interpretación de la gigantesca Gwendoline Christie. Sin caer en el histrionismo, ha dado vida a esa bestia violenta y valiente que no parece acabar de encontrar su sitio en el mundo. Tan ansiosa está ella por agradar, como yo por ver cómo resuelve el conflicto de lealtades que se está interponiendo en su camino. Porque como en todo buen gigante, bajo la armadura late algo más innato que la brutalidad de su espada.

Osha: la salvaje tiene un secreto

La española Natalia Tena da vida a otra de las mujeres que incluyo en el de grupo mujeres-que-prometen-pero-aun-ni-fú-ni-fá. Como Shae, el verdadero enigma está en quién es verdaderamente esta salvaje harapienta, que cuida del insufrible Bran Stark. Inquietante y espeluznante a ratos, la revelación de su verdadera personalidad se adivina como uno de los grandes golpes de efecto de la serie. Y no puede haber más ganas.

Olenna Redwyne: ojito con la abuela

Profeso absoluta y completa devoción a la “Reina de las Espinas”, lo confieso. Margaery tiene en ella a una gran maestra de la intriga, una abuelita que si hubiera surgido de la pluma de Charles Perrault habría acabado zampándose al lobo. Con una lengua afilada y un cerebro privilegiado, Olenna hace uso además de ese atrevimiento de la vejez, que le permite ser hiriente y malediciente siempre que le apetezca. Es decir, todo el rato. Ojo a este reptil de níveos cabellos, porque no tiene pinta de ser de las que se resignan a que no se cumplan sus designios, ambiciosos como pocos.

Melissandre: esta sacerdotisa está a medio hacer

Confieso que con la bruja roja tengo sentimientos encontrados. Es evidente la capital importancia de su papel en la serie, pero me inunda la impresión de que no se está aprovechando todo lo que se debiera, introduciendo sus embrujos y maniobras de una manera un poco abrupta. Dejando al margen lo que creo que no es más que problemas de adaptación del guión, la pelirrojísima irá tomando más protagonismo conforme el elemento fantástico inunde la serie, lo que de momento ocurre de una manera muy gradual.

Ygritte: la salvaje besada por el fuego

Como los personajes de Talisa Maegyr y Asha Greyjoy, la pelirroja aún no ha alcanzado un protagonismo relevante, aunque parece que lo tendrá. Hasta el momento, como salvaje escurridiza y burlona cumple con el papel, aunque lo que yo espero es que lleve a cabo una función vital: espabilar, de una vez por todas, a Jon Snow. Y parece que lo va haciendo…

 

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comentarios
1 Leopoldo Calvo, día

La principal virtud de Martin es la constante evolución de sus personajes. Casi todas las de arriba evolucionarán a peor, ninguna a mejor y otras evolucionarán hasta la tumba...

2 diego, día

Ayra Stark, o la inevitable niña machorro de todas las series, personaje increíble en la época y que se usa para cubrir el cupo de lo políticamente correcto, (¡Dios mío que hartura!). Es lo peor de una serie, que por otra parte está bastante bien. Por mí ya les pueden ir dando a las niñas futboleras y testosterónicas

3 TsukiNoKagami, día

Yo lo siento por la autora del artículo pero salvo Arya ninguna de estas mujeres evoluciona un pimiento. RR Martin saca personajes del tintero como si los regalaran y luego se olvida de ellos, los deja en segundo plano hasta que necesita contar qué está pasando en vete-a-saber-qué-parte-de-Poniente y después los mata. Al margen de eso, me sorprende que defienda la cantidad de mujeres interesantes que aparecen en la serie cuando luego una por una no le convencen más que un par.

4 eusebio, día

George Martin tiene la misma facilidad para crear personajes maravillosos como de cargárselos de manera caprichosa,el problema de eso es que con la muerte de muchos de los personajes las tramas que se llevaban entre manos mueren con ellos para ser sustituidas por otras menos interesantes,en mi opinión por eso la historia crece en interés de un modo bárbaro hasta llegar a lo que será la cuarta temporada de la serie,para una vez llegados a una cima,caer sin freno hasta llegar a una historia bastante insípida.Menuda decepeción que me supuso leer el quinto libro de la saga.

5 MeryMery, día

No puedo estar más de acuerdo con todas y cada una de las descripciones! Genial!

6 eusebio, día

Mi comentario no sale,¿porque?

7 Jesus Fc., día

Demuestra en esta crónica conocer poco los libros, pero aún así sin spoilers; Sansa es aún una niña que debe madurar a marchas forzadas, Lady Catelyn...bueno, dejemosla martirizandose y echemonos a temblar...Shae, es una decepción...Grandes descripciones de las damas de Altojardín y Roca Casterly. Comparto la desazón que genera Daenerys. Realmente Martín es un buen escritor para los canones actuales, no es un maestro de la fantasía pero si de generar historias que pueden ser vistas (No podría compararlo con J.R.R. Tolkien o C.S. Lewis...maestros de la escritura y del manejo de la lengua para crear emociones y mundos). Coincido con un comentario anterior; Martin abandona a muchos personajes buscando la rápidez en el desarrollo de la historia.

8 Javier, día

Me temo que Natalia Tena no es española sino británica. Temo que te has dejado llevar por su nombre y apellido, ya que es hija de españoles pero nacida en Gran Bretaña y con esa nacionalidad.

9 Espectador, día

Varios de los comentaristas anteriores se quejan de la tendencia de George R R Martin a liquidar a sus personajes principales.Yo debo ser un sádico, porque esta imprevisibilidad es lo que me mantiene interesado en los libros y en la serie (aunque ya se lo que va a pasar). No soporto las películas en las que "el bueno" se encuentra en unas circunstancias imposibles, y al final pasa algo y se salva. Cuando mi mujer y yo vemos una de esas películas y ella se asusta, le digo: no te preocupes, ¿no ves que es "el prota" y tiene que salvarse? (y acierto, siempre). O al contrario, me molesta saber desde la primera escena que la bella y fiel esposa india del oficial de caballería o del shérif va a morir indefectiblemente, que para eso es india, y no se pueden estimular las uniones interraciales. Con las novelas de Martin, como en la realidad, el ser "el bueno" no es garantía de triunfo ni el ser "el malo" de castigo (al menos inmediato; al final casi todos, buenos o malos, la palman, como en la vida real). Una parte del comentario ha sido borrado por un moderador que se ha leído los libros por contener spoilers del tamaño de un trolebús. Por favor intentad no fastidiarle la serie a nadie. Y aunque no me lo ha preguntado nadie, mi personaje favorito es Tyrion Lannister, posiblemente el personaje más complejo (junto con el eunuco Varis), y el único en esa familia de psicópatas que conserva su humanidad.

10 Archiduque Carlos, día

Uno de los mejores hallazgos de la serie son sus agudos y frecuentemente cortantes diálogos. En ellos se produce una intenso desarrollo de los personajes, que, sinceramente, supera a los de las novelas del Martin. Por poner un ejemplo reciente, en el 3º de la 3ª temporada se produce uno entre Catelyn Stark y su nuera absolutamente clave para entender el personaje de la matriarca. Pues bien, ese diálogo o no aparecía en las novelas o no lo recuerdo en absoluto. Algo similar ocurre con Tywin, cuyas escenas alcanzan una brillantez visual y de réplicas imposible de apreciar en la escritura. Desde aquel mítico diálogo de presentación en el que desuella el ciervo delante de Jamie (no por evidente deja de ser menos hermosa la metáfora), las escenas de Tywin se han convertido en una demostración de cómo la narración televisiva puede superar a la escrita, aunque hayamos leído previamente la última. Dentro de estos diálogos, me gustaría resaltar que los que realiza con Arya en Harrenhal, magníficos, tampoco estaban en las novelas. Más particularmente sobre personajes femeninos. Me gustaría destacar que la Cersei de TV está muchísimo mejor construída que la de las novelas. En TV, Cersei es inteligente y taimada. No tanto como se cree ella misma, cierto. Pero actúa con coherencia y dentro de un proyecto. En las novelas es simplemente una niñata malcriada e histérica, capaz de actuar de forma irreflexiva y de crearse problemas y enemigos por puro capricho; vamos, digna madre de su hijo. La mayor edad y serenidad del personaje de TV ayuda también. En general, este último punto, la mayor edad en TV, actúa en favor de casi todos los personajes. Curiosamente, todos me parecen mejor desarrollados que en las novelas. Con dos importantes excepciones: el "dúo dinámico" de Rocadragón. Stannis no parece digno, sólo cabreado. Y simplemente ambicioso, en lugar de comprometido con su deber. Lo de Melissandre no hay por donde cogerlo: en las novelas, aunque tiene enemigos, sabe ganarse lealtades, en lo que le ayuda su presencia. En la tele parece una vieja bruja a punto de coger la escoba.

11 Ramón, día

Concido con los comentarios anteriores: o no se ha leído los libros, o hace abstracción de ellos y trata a la serie como algo diferente. Mi impresión es de desorden puro y duro, a veces da la impresión de que ni el propio autor sabe a donde le conducen algunas de las tramas. Y llega un momento en que, con tanto tiempo transcurrido entre temporadas y entre los libros, pierde uno el hilo. Y el interés. No merece la pena el esfuerzo. Prefiero en este tipo de fantasía al maestro Tolkien, que no cansa. Y de las más recientes, a Patrick Rothfuss, que es más simple en apariencia pero me parece bastante más orientado que GRR Martin.

12 Barcelonés, día

No deja de ser curioso que este artículo está escrito desde el punto de vista de la serie televisiva. Si uno se ha leído los libros, sabe perfectamente lo que esconden cada una de los personajes femeninos, con lo que la sorpresa es bastante menor...

13 eusebio, día

Coincido plenamente con Archiduque Carlos,en la serie los personajes adquieren una profundidad que no tienen en los libros,tal vez sea porque aunque Martin sea un buen escritor,peca quizá de ser poco romántico y dado al melodrama,y en ese sentido la serie lo borda y los personajes son mas completos y humanos que en los libros.Y bueno,a mi no es que me moleste especialmente que personajes principales mueran,eso es verdad que le da cierto encanto a la historia al no haber nadie intocable,de lo que me lamento es que los personajes nuevos que van surgiendo junto con las tramas que se llevan entre manos no me llegan al alma como las de aquellos que ya murieron. :(

14 Espectador, día

¡Ups! Siento lo del spoiler. De hecho me contuve para no hablar de las muertes de ... ¡Es broma! No era con mala intención: yo al leer los libros salto al final para saber lo que va a pasar. De todas formas, para eso ni siquiera hace falta leer los libros: basta buscar en google los personajes o las casas para encontrar ordenado y resumido todo lo que Martin ha escrito hasta ahora. Supongo que el episodio sexto de la tercera temporada va a ser fundamental (a no ser que lo alarguen). ¿Es eso un spoiler? Si es así, bórrese esta parte.

15 maria paz, día

Mi opinión personal es que la serie es tal cual a los libros, tanto la historia como los personajes son muy autenticos y cada uno tiene sus particularidades. Sobre algunos de los personajes si puedo decir que me irritan como por ejemplo Sansa, pero de todas maneras esta serie a mi me tiene muy entretenida y me encanta. Lo unico que lamento es la muerte de Ned Stark. No me la pierdo por nada en el mundo.

16 Archiduque Carlos, día

El problema de Martin con Canción de Hielo y Fuego es que planea una novela río. Por ello sus personajes son tan inverosímilmente e jóvenes en los libros. Pero en determinado momento, se lía y no encuentra los hitos argumentales para parar las historia y proyectarla varios años al futuro. Se pierde tanto con las subtramas que tiene que reescribir, se dice pronto, prácticamente un libro entero, el que debía ser la segunda parte de Festín de Cuervos. Y a partir de aquí, el desastre: FdC quedó cojo y su segunda parte, que tenía que haberse publicado a continuación, tarda cinco años en aparecer porque la reescribe casi entera. Creo que, afortunadamente, Martin es consciente de algunos errores y los está paliando en la serie. O, simplemente, otros sí se han dado cuenta y le pagan lo suficiente a Martin para que se calle. Si la serie sigue en este tono, las temporadas venideras serán bastante mejores que los libros en que estén basadas...

17 Edgar, día

De acuerdo con la mayoría de personajes a excepción de Sansa de la que espero más, dado que su evolución es la que mas sorprenderá conforme vaya espabilándose a golpe tragedias que le deparan.

18 Guruku, día

Se nota horrores que quien a escrito esto no ha leído los libros y no entiende muchas cosas sobre personajes que critica muyyyy gratuitamente, lee los libros y quizás entiendas algo mas sobre las motivaciones de algunos personajes. Que de echo la serie es muy buena como tal pero es una patética adaptación de los libros donde ciertos personajes tienen muchísima más relevancia, son más completos y bastante mas complejos.

19 Alba, día

Vaya pedazo de chasco se va a a llevar la autora de este post conforme vaya avanzando la serie (y no muy tardando, por cierto) Te recomiendo que te dejes de series y te leas los libros, que te estas perdiendo muchas cosas y con estas especulaciones quedas un poco mal, en mi opinión. Y ya, ya se que la serie es una adaptación de los libros y no tiene que ser una imagen exacta y super fiel de ellos, pero es que... tela.

20 Abys, día

Pues no es por nada, pero te vas a llevar mas de un chasco. Mas de una de la lista de ni fu ni fa no pasa de ahi. No destacan en nada, son siepre simples segundonas, pese al potencial que parecen tener.

21 Mindersh, día

El momento de Sansa no ha llegado. Disfrutaré muchísimo cuando llegue el punto en el que todos AMARÁN a Sansa. Vengo del futuro y así os lo hago saber xDDDDD.

22 Ven, día

Alerta spoiler

23 Andrea Stark., día

Me paso a decir que se nota mucho que la persona que ha escrito este artículo solo ve la serie, y, sin ofender, no debería hablar sobre lo que cree ella de un futuro que es pasado para algunos (como yo) porque la caga un poquito solo con sus predicciones.

24 Natalia, día

Has pedido a alguien para defender a Sansa y aquí estoy yo! Lo siento, pero me gusta, me parece alguien que cubre su miedo con las palabras para salvarse de lo que le venga. No es peleona como Arya, ni valiente como Brienne, ni manipuladora como Cercei o Margaery, pero hasta ahora se ha salvado de todo lo que le ha tocado a base de aceptar y ser correcta, gracias a ello el enano ha preferido no tener relaciones con ella, al verla tan "amable" y "buena". Seguramente debajo de toda esa amabilidad hay mucha rabia, ya lo vimos en el final de la 1º temp, estuvo a punto de empujar a Joffrey, pero ha preferido como estrategia la careta de "niña sumisa". Al menos así lo veo yo, solo he leído hasta la segunda novela, pero creo que, aunque Martin no profundiza de todo, si nos deja ver sus personalidades bastante bien...

25 Diana, día

Como puedes decir que Sansa es buena y amable. Es una mentirosa y una traidora. Mintió sobre la pelea de Jofrey con Arya. Fue de traidora con Cersei cuando su padre pensaba regresarlas a Invernalia. Arya ha sufrido demasiado a pesar de su corta edad y ha pasado muchos más peligros que la tonta de Sansa, siempre haciéndose la víctima y esperando a que los demás la salven, parece como si no hubieras leído los libros.

26 sara, día

Yo no se como aguanta Catelyn es la modelo de señora noble, pues mantiene las formas con todo lo que la pasa...y es la que peor lo está pasando desde luego