Como para amargarle las fiestas a cualquiera.

Esta realidad que cuenta doña Regina, se repite constantemente por cantidad de pueblos de la geografía vasca. Es nauseabundo y en mis tiempos de visita a fiestas de pequeños pueblos, me producía arcada y asco. En una ciudad siempre te puedes alejar de esa basura, pero en un pueblo, esa presión mezclando "cultura"-terrorismo-fiestas-deporte-terrorismo es absolutamente constante, logrando ese efecto de parecer que todos están-y deben estar- cortados por el mismo patrón; ahogando por tanto toda posibilidad de que alguien diga que piensa otra cosa. Ellos saben que hay gente que no comparte sus postulados, pero se trata de ahogarles, los 365 días al año; adueñarse de toda representacion legal y social.

Estimada Regina: Me emociona mucho leerte después de todo lo que he leído sobre Bildu y la diputación de Guipúzcoa. Te vas a reír pero he pensado en ti principalmente. Me hiela la sangre conocer la forma en la que tenéis que vivir allí arriba y con este tipo de post junto con lo de Bildu cada vez me duele más Euskadi. No sé cómo podría ayudarte pero te diré que todo lo malo que pasa no lo hace en balde y que a la larga todos seréis libres de una forma apoteósica así como esa gentuza la historia la va a dejar como lo que son: escoria. Un abrazo fuerte, ¡valiente!, no decaigas. AR (no, Ana Rosa no)

Admirada Regina: Será un verano de homenajes, honores y enaltecimiento de los más despiadados criminales, asesinos y terroristas, que nos esperea va a ser de cuidado. Las presiones para que salgan a la calle van a ser de una brutalidad extrema y lo que es peor, el chantaje: "o salen o vuelve la violencia" y como nos descuidemos la población vasca, con esos "maravillosos y valientes" medios de los que dispone se tragará el cuento y encima os echará las culpas. Llegados a este punto lo me preocupa, no son ellos. Lo que me preocupa es la inacción, el bloqueo, el estupor en que los buenos estamos sumidos. Es un problema que ellos estén crecidos, chulos y atacando por todos los lados, pero más problema es nuestra paralisis. A modo de ejemplo: - No ha habido reuniones de los distintos grupos que formaron la Rebelión Civica para diseñar una estrategia y lo más importante, mandar un mensaje común. - Hemos sido incapaces de crear un logo unitario, similar a ese de los criminales con el mapa de la Gran Euzkadi y las flechitas. - Hemos sido incapaces de crear un lema unitario, similar al "Presos etxerak" - Hemos sido incapaces de crear con voluntarios de los distintos grupos estructuras permanentes que lleven la lucha anti ETA en el campo publicitario: trabajo en ámbitos políticos y periodísticos extranjeros, trabajo en los medios en euskera, trabajo con los sectores de la izquierda para ir minando el abrumador apoyo o cuando menos absoluta inacción de la mayoría de los izquierdistas ante ETA, creación de páginas web potentes que centralicen informaciones. - Es preocupante que lleguen las fiestas y armen las que arman, pero más preocupante es que quien ha sido capaz de sacar más de medio millón de personas no pueda movilizar a unas pocas decenas de voluntarios para estar presentes con mesas informativas en las Semanas Grandes. - No haber realizado un sólo acto de apoyo a amenazados y víctimas en el Pais VAsco.

Normalmente se recoge lo que se siembra. Hace años, alguien o mejor dicho alguienes (me temo que estén en varias direcciones) decidió que eso de los movimientos populares contra el terrorismo había que cargárselo. Al fin y al cabo teníamos el bálsamo de Fierabras que solucionaría todos los problemas: la ilegalizacion política de los terroristas. No que no quisieron ver ese alguien y esos alguienes que esa ilegalización serviría de muy poco si no iba a compañada de un enorme trabajo intelectual, político, de ideas, de propaganda para ir socavando el apoyo social al terrorismo y los apoyos externos que este recibía de un modo más o menos vergonzante o más o menos expreso: los nazionalistas con su doble triple y cuadruple lenguaje... aunque una única línea de acción de apoyo, las izquierdas embelesadas por un supuesto caracter izquierdista y revolucionario en una gente que se denomina sabiniana con lo que eso significa de racismo y extrema derecha pura y dura, los extranjeros siempre bajo los efectos narcóticos de quien todavía nos ven con los ojos románticos del siglo XIX. Obviamente, estos años de parálisis, de paralización de todo tipo de iniciativas y trabajos han hecho que el 22-M despertáramos de un placido sueño para encontrarnos la horrible pesadilla de Martín Garitano, el gran fascita entre un coro de ultrafascistas, dirigiendo nada más y nada menos que la Diputación de Guipúzcoa y el PNV actuando como no podía menos con su trayectoria de 60 años de apoyo soterrado al a los terroristas y sus cómplices. Ya no se puede serguir mirando a otro lado. Ahora hay dos caminos. O volver a empezar o terminar de hundirnos. En nuestra mano, la mano de todos en la medida humilde de nuestras posiblidades, está el decidir que camino tomamos.