El espacio-tiempo y la ministra cabrera (con minúscula)
Uno de los problemas al que se enfrentan los socialistas continuamente es el derivado de valorar la inteligencia de todos los españoles en función de la suya y sus votantes. Luego pasa lo que pasa, por ejemplo, que Libertad Digital descubra sin dificultad que el mensaje grabado por la ministra cabrera para celebrar la sentencia del Tribunal Supremo sobre EpC se publique dos días antes de que se produzca el dictamen.
Mas no deberíamos quedarnos sólo en el aspecto chusco del asunto, porque se trata de algo mucho más grave. Con acciones como las de la ministra cabrera constatamos que en España no existe la seguridad jurídica ni la tutela efectiva de los derechos constitucionales. Y eso, que para los socialistas, enterradores de Montesquieu, carece de importancia (siempre que el resultado favorezca su agenda política), es de extrema gravedad para la convivencia cívica.
Queda en evidencia, una vez más, que los altos tribunales son órganos politizados que obedecen lanarmente a la artitmética política de las mayorías que nombran a sus miembros, sin que quepa la menor discrepancia. No de otra forma se puede entender que un ministro conozca el veredicto de un caso antes de ser debatido por el organo jurisdiccional, y además con tanta seguridad que comete la desfachatez de comentarlo y enviarlo a una red pública con un par de días de antelación.
La ministra debería dimitir y todos y cada uno de los miembros del Tribunal Supremo también, sencillamente porque ni la una ni los otros nos valen como garantes de nuestros derechos cívicos. Si quieren gobernar como sus admirados Castro y Chávez que lo digan y obren en consecuencia. No habría mayor problema porque tendrían a su favor a la mayoría de medios de comunicación y a una gran parte de la población española, tan aborregada como suicida. Pero que lo digan. Lo de mantener la ficción de que España es un estado de derecho ya no es ni siquiera un sarcasmo. Es la constatación de que vivimos en un orden totalitario que, encima, cuenta con el consenso de todos los partidos sin excepción. O sea, más bien triste ¿no?
Mas no deberíamos quedarnos sólo en el aspecto chusco del asunto, porque se trata de algo mucho más grave. Con acciones como las de la ministra cabrera constatamos que en España no existe la seguridad jurídica ni la tutela efectiva de los derechos constitucionales. Y eso, que para los socialistas, enterradores de Montesquieu, carece de importancia (siempre que el resultado favorezca su agenda política), es de extrema gravedad para la convivencia cívica.
Queda en evidencia, una vez más, que los altos tribunales son órganos politizados que obedecen lanarmente a la artitmética política de las mayorías que nombran a sus miembros, sin que quepa la menor discrepancia. No de otra forma se puede entender que un ministro conozca el veredicto de un caso antes de ser debatido por el organo jurisdiccional, y además con tanta seguridad que comete la desfachatez de comentarlo y enviarlo a una red pública con un par de días de antelación.
La ministra debería dimitir y todos y cada uno de los miembros del Tribunal Supremo también, sencillamente porque ni la una ni los otros nos valen como garantes de nuestros derechos cívicos. Si quieren gobernar como sus admirados Castro y Chávez que lo digan y obren en consecuencia. No habría mayor problema porque tendrían a su favor a la mayoría de medios de comunicación y a una gran parte de la población española, tan aborregada como suicida. Pero que lo digan. Lo de mantener la ficción de que España es un estado de derecho ya no es ni siquiera un sarcasmo. Es la constatación de que vivimos en un orden totalitario que, encima, cuenta con el consenso de todos los partidos sin excepción. O sea, más bien triste ¿no?
No entendéis a la ministra. En su libro "luz y taquígrafos" (Taurus 2002) hay un capítulo denominado "luz y taquiones". Los taquiones son unas partículas postuladas por Gerald Feinberg, físico, que poseen la propiedad de ir de 300.000 km/seg. (velocidad de la luz) hasta infinito. Ésto, según la física cuántica, implica la posibilidad de un viaje atrás en el tiempo. Es decir, la ministra, montada en un haz de taquiones, conoció el lunes lo que iba a suceder el miércoles. ¡Si es que sois unos ignorantes!
Vale. Necesito, urgentemente, que la menistra me deje un par de taquiones. Es que tengo que acertar una primitiva... PERO YA!!! Antes, los golfos disimulaban un poco cuando eran pillados cometiendo un delito. Ahora lo hacen público a través de internet.
Dimitir? Pero hombre Pablo! si parece que no los conocieras! Aquí no dimite ni el Tato ni aunque les pillen con la mano en la caja o, en este caso, sentados entre los magistrados del TS vigilando a ver qué dicen. Ahora en serio, yo creo que todas las asociaciones de padres de alumnos que van a recurrir al TC deberían, además, querellarse contra la menistra cuotil y esos dizque jueces porque lo que han hecho son dos, que mola más que uno, delitos, el primero revelación de secretos (se supone que las deliberaciones han de ser secretas) y el segundo una prevaricación de tamaño colosal. Si esto fuera un país serio a algún fiscal le habría faltado tiempo para enchironarlos, pero claro, no ahce falta decir que si fuéramos un país serio no habrñia 12 millones de imbéciles analfabetos que votasen al nazi que okupa la moncloa. PD: me encanta tu blog, lo leo siempre aunq es la 1ª vez que escribo aqui.
Más grave que la inoportunidad de la Ministra Cabrera, me parecen las filtraciones de algunos de los Srs. Magistrados, que no tienen escrúpulos en difundir a "sus amiguetes" lo que debería ser un secreto profesional, mientras no se redacte la sentencia. Es para dejar de creer en la Justicia o en muchos de los que la imparten. Yo tenía serias sospechas de que algunos Jueces podrían estar politizados, y sus decisiones canalizadas hacia determinada tendencia política, pero es mucho más de lo que de mi buena fe podría esperarse. ¿Que seguridad podemos tener jurídicamente en determinados Magistrados, si da la sensación de lo que les interesa es tener contento al Gobierno de turno, y no lo que procesalmente debe imperar como Doctrina Jurídica en beneficio de la Ciudadanía? Si esto sucede gobernando el PP, los titiriteros, los sindicatos, los afiliados del PSOE, etc., serían un clamor contra la Administración y Autoridades Competentes, y sus actos vandálicos hubiesen dejado intransitables muchas calles de Madrid. Pero los afectados con esta incomprensible sentencia somos otros, y nuestros sanos principios y educación cívica nos impide es tipo de manifestaciones y algaradas. Lo que procede es, con firmeza y con todos los requisitos Legales que nos amparan, recurrir al Tribunal Constitucional, y ahí defender con gallardía y argumentos, lo que a nuestro juicio es una Sentencia Equivocada, y de la que sin duda se derivarán consecuencias muy negativas para la formación integral de nuestra juventud.
Una auténtica vergüenza lo del vídeo de la Ministra, y hay que dar la enhorabuena a 'Libertad Digital' por haber descubierto el pastel. Pero no, desde luego que no dimitirá, puesto que ya sabemos que estos 'progres' no se van ni aunque les pillen 'in fraganti'. Y es que, dada la 'superioridad moral de la izquierda', se consideran por encima del bien y del mal. Pero mucho ojo, que la batalla contra esa intolerable intromisión del Estado en la sociedad civil no ha terminado, ni mucho menos. Que no canten victoria tan pronto. http://apuntesenlibertad.blogspot.com/
INSUMISIÓN: si nos prohíben la objeción contra la EpC, la solución es la insumisión.
que paren que me bajo... y el psoe suprando al pp "con creces" en intencion de voto gentuzo y peleles, lo repito QUE PAREN QUE ME BAJO QUE ESTO DESCARRILA
Basta ya de chapuzas! Esto no es serio!!