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The Rolling Stones: Del Marquee Club a la leyenda (IV)

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A su regreso de los Estados Unidos, The Rolling Stones editaron su segundo Lp, The Rolling Stones No.2, con el que consiguieron llegar al número uno de singles gracias a la versión “It’s all over now” de The Womack Brothers, que también recordaréis como The Valentinos. Ese mismo año, 1965, grabaron el Ep “Five by Five” y volvieron a girar por los Estados Unidos, ahora recibidos con mayor aclamación tras la publicación de los Lp´s The Rolling Stones (England’s Newest Hitmakers en USA) y 12 x 5, alcanzando en el Billboard los puestos 11 y 3 respectivamente.

Aunque la banda británica estaba en lo más alto de su popularidad, el insaciable Oldham deseaba que el grupo emulara a The Beatles y compusiera sus propios temas con mayor profusión. Así que encerró al grupo en una habitación con la intención de que no salieran de allí sin construir buenas canciones, que sirvieran como Cara A de su siguiente single. La respuesta de la banda sería “The Last Time”, inmortal sencillo con mítico riff de Jones que llegó al número 1 en 1965, grabado en Los Ángeles con la producción de Phil Spector, quien introduce el zoom bass en la Cara B “Play with Fire”.

Ese mismo año publican su tercer Lp en los Estados Unidos, The Rolling Stones Now, un trabajo que incluía temas como “What a shame”, “Off the Hook”, “Surprise, Surprise” o “Little Red Rooster”. A partir de “The Last Time” todos los singles llevaron la firma de la pareja Jagger-Richards. El 20 de agosto publican una de sus canciones mas emblemáticas, “(I can’t get no) Satisfaction”, pieza fundamental en su carrera, y artísticamente apreciada por el fuzz en la guitarra de Richards, que logró el Nº1 en todo el mundo. A finales de agosto, Andrew L. Oldham se asoció con Allen Klein, sustituyendo a Eric Easton en la representación de la banda.

El 17 de octubre de 1965 aparece “Out of our Heads”, que no pudo con el número uno de los Beatles, “Help”, consiguiendo el segundo puesto de las listas británicas. El álbum en su versión inglesa, no es de sus mejores obras, pero cuenta con conseguidas versiones y temas propios como “Heart of Stone”, “I’m Free” o “Gotta get Away”. En cambio la versión norteamericana, con temas como “Satisfaction” o “The Last Time”, alcanzó su segundo número 1 en Lp´s, mientras que los singles “Get off of my cloud” y “The Singer not the Song” llegarían a lo más alto en las listas de buena parte del mundo. Todo se estaba preparando para el año 1966.

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comentarios
1 Ortega y Punset, día

Yo nunca le he dado importancia al hecho de que una canción, un single o un disco llegue o no a número 1 de las listas. Primero, porque el tiempo suele hacer más justicia que una lista de una semana, y segundo, porque no se valora la competencia de ese momento. Si The Beatles no hubiera sacado Help, Stones habrían alcanzado el número 1 en ese momento... o no. ¿Eso hace mejor o peor un disco? Por supuesto que no. Podría recordar ahora mismo lo de las Spice Girls y su número 1, pero me da tanta pereza... Por cierto, los Womack Bros. de los que hablas, ¿tienen algo que ver con Bobby Womack? He visto un disco reciente de ese señor y podría ser uno de ellos. Off Topic: Para mí es más AOR Toto o Journey que Boston. Saludos

2 Diego Cardeña, día

Efectivamente my friend!! Y respecto al AOR... Journey y Toto claro que entran ahí, pero bandas como Foreigner o Boston también. Aunque nada como el parecer de cada uno. Un abrazo!!

3 MT10, día

Creo que las batallas por ubicar a una banda en uno u otro género son fantásticas para un bar, pero acaban siendo muy dañinas. ¿Qué más da encontrar un buen disco con la etiqueta AOR, Hard Rock, Easy Listening o Pop-Rock Internacional si lo que va a tener dentro va a ser fantástico?

4 El Repoblador, día

Bueeeeno, estamos a punto del Aftermath, donde en mi opinión empieza lo bueno, donde empieza a forjarse la leyenda de la mejor banda de rock n´roll de la historia. También en esta época conocen, en sentido bíblico, of course, a una persona muy importante en el universo stone, Anita Pallenberg, femme fatale por excelencia y peligro en estado puro. A ella le debemos que Brian Jones recuperara la confianza en si mismo cuando el tandem Jagger-Richards comenzó a convertirse en la más perfecta máquinaria compositora de la historia del rock, dejándolo de lado, pero al mismo tiempo, su condición de mujer fatal, vicio y glamour a partes iguales, arrastraron probablemente a Jones a su hundimiento que desembocó en su misteriosa muerte, además de amenazar la estabilidad del grupo. Si "Veneno en la piel", de Radio Futura, no está dedicada a ella, merecería estarlo. Respecto al tema del AOR, fíjate que aunque las cuatro bandas son el paradigma del AOR, yo también he considerado siempre a Boston otra cosa, para mí mejor, pero que tenía mas que ver con las obsesiones de un genio chiflado, Tom Scholz, obsesionado con el sonido de su banda que con las otras tres bandas que en mi opinión si que tienen más puntos en común. ¿Os habéis parado a mirar las capas de guitarra que hay en cada disco de Boston?. Es un no parar, perfeccionismo casi enfermizo, el antecedente de Axl Rose. No se, en Boston, la etiqueta AOR a veces se me queda pequeña.

5 ANTONIO PEREZ GOMEZ, día

En EE.UU. salen de gira juntos Def Leppard, Styx y REO Speedwagon y dan los conciertos juntos. AOR AOR AOR Y para AOR nacional, Falete!

6 Ortega y Punset, día

Pues te doy toda la razón, qué quieres que te diga ;)

7 Ortega y Punset, día

Ayy, no adelantes acontecimientos, que seguro que Diego va a hablar de eso para el siguiente capítulo! :) Tengo que repasar la discografía de Boston a la voz de ya.

8 Ortega y Punset, día

De AOR nacional los míticos 91 Suite.

9 El Repoblador, día

Espero no haber metido un spoiler del serial de Diego. La discografía de Boston la comparo con un fondo de armario, algo que siempre hay que tener a mano. Me parece que Michael Sweet de Stryper ha estado girando con ellos ocupandose de las voces después del suicidio de su cantante original, Brad Delp.