El 22 de agosto de 1717 el monarca español Felipe V ordenaba iniciar las hostilidades que terminarían con la conquista de Cerdeña. El Rey, efectivamente, daba la orden, pero quien la inspiraba era su mujer, Isabel de Farnesio. En 1717 estaba en plena vigencia el Tratado de Utrecht, firmado cuatro años atrás y en virtud del cual España cedía a Austria todos sus territorios en Italia. La prudencia no aconsejaba romper ese tratado sin contar con el respaldo de una alianza fuerte, pero a la flamante nueva esposa del monarca le apremiaba ganar nuevos reinos donde colocar a sus retoños.

Isabel de Farnesio era la hija del duque de Parma y llegó a la corte de la mano del cardenal Alberoni, que aconsejó a la princesa de los Ursinos su elección como esposa ideal para el monarca. Nada más llegar, Farnesio se deshizo de Ursinos y formó con Alberoni un tándem que acaparó por completo al monarca, cerrando su despacho al resto de consejeros. Farnesio se deshizo de toda la corte afrancesada que Luis XIV había puesto en torno a su nieto, lo que a priori gustó a sus vasallos, pero su verdadera pretensión era italianizarla. Esa falsa expectativa, unida a su antipático carácter, puso al pueblo en su contra pero la reina consorte no tuvo por ello mayor desengaño. «Los españoles no me aman, pero yo también les odio a ellos», diría.

Farnesio y Alberoni cambiaron el rumbo de la política exterior del Borbón iniciando una campaña en Italia cuyos objetivos fueron Cerdeña y Sicilia. Alberoni preparó con esmero la acción, reactivó la industria militar, abrió fundiciones, intensificó el reclutamiento de tropas y compró barcos, al tiempo que reducía el gasto público y subía la carga fiscal. Demasiada iniciativa para un hombre que, aparte de ser cardenal, no ocupaba cargo político alguno. Alberoni formó una flota de 300 barcos y 30.000 soldados que lograron sus objetivos pero, como era previsible, la Gran Alianza se armó enseguida y derrotó escandalosamente a los españoles en cabo Passaro. Alberoni fue el chivo expiatorio pero la maniobra perjudicó la política exterior de España que se ganó una inesperada enemistad, la de Francia.

Farnesio lograría mucho después colocar a uno de sus hijos en Italia. Sería en Nápoles, reino que se recuperó casi sin pretenderlo durante la guerra de sucesión polaca. Allí gobernó durante 25 años el infante don Carlos, que reinaría también en España como Carlos III.

Otras efemérides de este día que deberías conocer

1526: El conquistador Toribio Alonso de Salazar conquista en el Pacífico las islas Carolinas.

1741: Haendel empieza a componer El Mesías.

1791: Alzamiento de los esclavos de Haití.

1862: Nace el compositor francés Claude Debussy.

1936: Asesinato selectivo de presos en la Modelo de Madrid. Melquíades Álvarez, Julio Ruiz de Alda y Fernando Primo de Rivera, entre otros.