El 26 de agosto de 1648 moría el fundador de los Padres Escolapios, San José de Calasanz. Desde su temprana educación cristiana a cargo de un grupo de religiosos, José sintió una única y entusiasta vocación, la de salvar almas. No fue fácil convencer a su padre, noble aragonés, que quería que su primogénito administrase sus bienes y optase por una vida de armas. Pero entonces le sobrevino a José una fuerte enfermedad que afrontó con una promesa: encomendar su vida a Dios si sobrevivía. No hubo más remedio que permitir la ordenación sacerdotal del futuro santo. A nadie debía sorprender. Desde pequeño mostró una inclinación a la santidad que al principio molestaba a sus compañeros, por creerla impostada, pero al tiempo acababa por sobrecogerlos. Su vida entera fue una lucha contra el mal y por agradar a Dios.

Sus buenos servicios en el obispado de Urgel le convirtieron pronto en vicario, pero San José sentía una llamada mayor que le inclinaba hacia Roma. Siguió su instinto, renunciando a hacer carrera eclesiástica, y tras repartir sus bienes entre los necesitados marchó a la ciudad eterna donde se hizo socio de una cofradía que enseñaba catecismo a los niños. Viendo que las necesidades eran grandes, decidió fundar escuelas que se encargasen de la formación integral de aquellos pobres desamparados. Así fundó su primera escuela, que pronto llegó a los cien alumnos y después a los mil, pero ya por entonces el santo, su fiel San Camilo y otros venerables amigos habían creado una red de Escuelas Pías a cuyos maestros llamaron los Padres Escolapios.

A San José de Calasanz le comparan al santo Job por la templanza con la que llevó la persecución a la que le sometieron algunos de sus contemporáneos, que quisieron arrebatarle la dirección de su obra. San José se vio sometido al examen de la Inquisición y cayó en desgracia perdiendo el cargo de Superior General de la Congregación. «Dios me lo dio, Dios me lo quitó. Bendito sea Dios», diría San José emulando a Job. Aun oscureciendo el tramo final de su vida, su obra permaneció y las Escuelas Pías fueron rehabilitadas por el papa Alejandro VII. Hoy se extienden por cuatro continentes y el ejemplo de San José ha inspirado nuevas órdenes, como las Escolapias y las Calasancias.

Otras efemérides de este día que deberías conocer

1270: Fallece, víctima de una epidemia, Luis IX, rey y santo francés.

1530: Nace Iván IV, zar de Rusia apodado El Terrible.

1707: Nace Luis I, el del breve reinado.

1737: El célebre cantante castrati Farinelli canta por primera vez ante Felipe V.

1948: Entrevista de Franco con don Juan en el yate Azor.