Si eres capaz de leer esto quiere decir que nuestro Fabián de Libertad Digital ya está de nuevo en órbita como un sputnik con los faros mejorados. Nuestros besos para él. Aprovechando que con su ausencia no se ha podido subir a la página tu texto, me cuelo para contestarme a mí misma por lo escrito la última vez. No sé si te dará tiempo a leer esto en España o ya lo harás cuando regreses a Londres. Me tienes que contar qué tal fue la actuación de Nancys Rubias en la fiesta de los premios de la revista Glamour. Y yo te tengo que contar lo bien que me lo estoy pasando en Londres. Y lo bien que me lo he pasado grabando las voces del disco.

Así que retiro lo dicho. Una vez superados los nervios del primer día y el soponcio inicial de fan fatal, puedo decir que nunca me lo he pasado tan bien cantando un disco. Me encanta el sistema de trabajo, el carácter de los productores, el estudio en el que estamos... Tengo que reconocer que cuando Nacho tiene estas ideas de productores y remezcladores siempre pienso que son imposibles, soy una pesimista de manual. Así que ahora que el disco ya está avanzado y empieza a contarme que va encargar una remezcla a éste y a otro, ya no pongo peros.

Cuando regreses a Londres habré terminado de cantar el disco, así que podremos darnos algún paseo más sin miedo a coger frío y perder la voz. Te debo un tour por Whitechapel, enseñándote los rincones que la leyenda urbana atribuye a los asesinatos de Jack el Destripador, o las supuestas alineaciones de iglesias y monumentos (básicamente obeliscos) que se dice colocaron los masones de forma estratégica y mágica para trazar un pentáculo sobre el mapa de la ciudad. Me estoy poniendo un poquito Cuarto Milenio, pero ya sabes que me encanta, soy hija de aquellos programas maravillosos de Jiménez del Oso y de una colección de Planeta de la que siempre te hablo, Otros Mundos, donde en mi adolescencia descubrí todo lo relacionado con ovnis, sociedades secretas, espíritus, teorías de la conspiración, exorcismos y desapariciones en el Triángulo de las Bermudas. Carlos Berlanga también atesoraba esos libros, de hecho creo que el tomo sobre los cátaros que conservo fue suyo. Ahora mismo estoy releyendo Desde el Infierno para sumergirme en el Londres victoriano más abismal. Siempre te digo que considero que Alan Moore es uno de los mejores escritores actuales, independientemente de que use el cómic como vehículo para ilustrar sus elucubraciones, ¿nunca voy a conseguir despertar tu interés hacia él?

Por lo demás decirte que en tu breve ausencia hemos seguido con nuestra pequeña rutina diaria, madrugar, desayunar, ir andando al estudio con alguna parada para compras compulsivas, sidra en el pub, vino con los productores, vuelta a casa, compra de alimentos en Mark & Spencer, cena y a dormir. No hace falta que te recuerde que el simple hecho de estar en esta ciudad me hace feliz. Mira, esa es una de las cosas que me hace feliz en sí misma, estar en Londres. Y cuando tú regreses, pues felicidad doble.